Antes de empezar a entrenar AIKIDO era un ratón de biblioteca moderno, o sea, no salía de Youtube. Estaba maravillado de ver todas las proyecciones fantásticas, las caídas maravillosas y toda esa majestad que regala el aikido a la retina de quien lo ve. Enseguida surgió en mí esa duda que a todos ataca y llegué a la conclusión que todos llegan: Eso no puede ser verdad; son ataques de mentira. Adicionalmente, me di cuenta que los ataques que realizaba UKE (eran poco creíbles, es más quién en su sano juicio atacaría con un SHOMEN UCHI, nadie verdad? Eso aumentó mi suspicacia, pero decidí tomar la decisión de entrenar o no en Dojo. A decir verdad, después que vi el primer entrenamiento no me convencí del todo, pero me quedé. Me encantaba la "facilidad “con la que se realizaban las técnicas, pero sobre todo las proyecciones.
Tiempo después, o sea, hoy, luego de muchas horas de entrenamiento, de sudar el GI y esfuerzo entendí la razón de los ataques, de la necesidad de la energía y es que ambos temas van de la mano si se desea practicar.
Lo que diferencia ciertamente al AIKIDO de otras artes marciales, es que el practicante (tori, quien realiza la técnica) aprende a redireccionar la energía del oponente, sea el ataque que sea. En principio hay ataques tipos, pero con un poco de práctica, éstos se van volviendo más reales. Lo importante no es cómo te ataquen lo importante es aprender a "salirse" de la línea de ataque con el menor esfuerzo posible, que el ataque no te vulnere en ningún momento, en salvaguardar la integridad física, que a la postre nos servirá para realizar casi cualquier técnica.
Entonces, cuando estés entrenando recuerda en principio cuidar dos cosas primordiales: cuando seas UKE, recuerda sin importar cual sea el ataque debe ser decidido y fluido. Cuando seas TORI, recuerda siempre estar muy relajado (relajado no flácido) luego de entendido esto: muévete con rapidez sin perder la forma y luego realiza la técnica con fluidez. Sé que escribirlo es mucho más fácil que hacerlo...
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